Flamenco de viernes noche

El tiempo sigue corriendo y apretando, ahora más que nunca, pero después de una semana dura de biblioteca, presentaciones en clase etc encontré un hueco para el ocio, que no viene nada mal.

Y allá que nos fuimos al Teatro Principal y nos sacamos unas entradas para ver Tiempo Muerto, producida y dirigida por Rafael Amargo.

Nos sentamos en el palco de arriba, bien situados. El teatro se llenó. El palco lleno de gente joven, y en la parte de abajo todo eran abuelitos marchosos, o maduritos (vosotros, los bloggers fijos, entrariais en la parte del palco).

Entramos al teatro sin que nos gustara demasiado el flamenco, y salimos pegando zapateaos, con ganas de repetir, nos quedamos boquiabiertos y con ganas de más. Os recomiendo ir si teneis la ocasión, vale la pena.






Hubieron muchas anécdotas, pero el toque más humoristico lo pusieron los abuelillos. Se encendieron las luces y Amargo bajó por el pasillo a saludar a la gente, las mujeres se volvieron locas y todas se levantaron, de repente se volvieron a apagar las luces y la gente mayor no veia nada y no sabian dónde estaban sus asientos, y se kedaron de pie media hora más hasta que terminó la función. Fue divertido.

Resumiendo, os recomiendo que vayais. No es flamenco puro y duro. La música era clasica-aflamencada. Los músicos fueron unos maestros, cada uno de su instrumento, hicieron verdadero arte de sus flautas dulces, piano, cajones y violín. ARSAAAA